Llegados al cuartel de la Guardia Civil de Sarria nos encontramos con una imagen estupenda. La seguridad de todos los peregrinos se refuerza con 1000 «ángeles verdes» más.
Como decía un compañero vuestro la semana pasada «nunca me había fijado pero están en todas partes».
Una vez terminado el acto oficial, hablamos con los agentes. También nos explican su malestar y tristeza por lo que pasa en Barcelona y nos confirman que no entienden ese «odio visceral» hacia sus compañeros.
Nos explican que las NORMAS (saber qué se puede hacer y qué no) son necesarias en cualquier sociedad. Los DIEZ MANDAMIENTOS dejan muy claro qué no pueden hacer los cristianos.
Tenemos normas familiares, que a veces nos saltamos...¡pero estamos todo de acuerdo con lo importante!
Para que una norma sea útil debe ser conocida y aceptada por todas las personas.
Sin normas
hay líos.
Toda actividad humana está regida por reglas. La finalidad de las reglas o normas es, precisamente, hacer posible una actividad determinada, hacer que se desarrolle de la mejor manera posible.
Todos los países, por primitivos que sean, tienen ciertas leyes, miles de leyes, que regulan la compra de una casa, el tráfico en las calles y carreteras, la educación a todos los niveles, la caza, los ruidos, las basuras, los bares, los hospitales. No existe un sólo juego sin reglas: necesitamos reglas para saber cómo se mueven las fichas, cuándo es gol, quién gana un partido.
Para un juego nuevo, o para realizar bien cualquier actividad, hacen falta algunas reglas y para inventar esas reglas necesitamos el pensamiento medios-fin. Tenemos que tener claro nuestro objetivo (lo que queremos hacer) y pensar los medios para conseguir eso, es decir, las normas o reglas que necesitamos.
También para poder juzgar las reglas que han impuesto otros (el Gobierno, la Dirección General de Tráfico, la Federación de Fútbol, nuestros padres y madres, nuestro ROF), necesitamos el pensamiento medios-fin: sólo con él sabremos si esas reglas son eficaces para el fin que se pretende.
El hecho de que las reglas sean necesarias no justifica cualquier clase de regla: puede haber reglas injustas que favorecen a unos sobre otros, puede haber reglas inútiles, puede haber reglas ineficaces que no sirven para nada y puede haber reglas autoritarias que se han impuesto sin consultar y sin respetar a los demás. Como generalmente todas nos molestan, es muy importante distinguir entre las buenas y las malas. La rebeldía contra las reglas no es mala, cuando se dirige contra las injustas o arbitrarias, pero es irracional cuando ataca las reglas justas y necesarias.
5.Haz un dibujo con una frase al pie.
Para favorecer tu inspiración ahí tienes algunas frases para que elijas una y le hagas un dibujo, o algunas ideas para hacer un dibujo, inventando una frase al pie.
Posibles frases:
• Donde no hay normas, hay caos.
• Quien no cumpla las reglas, que no juegue.
• Reglas pocas y buenas.
• Las normas deben revisarse de vez en cuando.
Posibles escenas para dibujos:
• Imaginar un partido de fútbol sin reglas, todos a patadas y empujones.
• Una vista aérea de una cárcel y se oye una voz «aquí están quienes no quisieron cumplir las reglas».
• Uno va sin casco en la moto y la policía lo multa.
RENOVARSE O MORIR....
¡Tenéis razón, no tenemos cuaderno tenemos classroom!
Continúa a
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